El hombre, la mujer
inteligente se ha sentido muchas veces, y se siente preocupado (a) por resolver
la triple interrogante de su existencia en este mundo y reflexiona sobre: ¿Quién soy?, ¿de dónde
vengo? , ¿a dónde voy?, las cuales constituyen el principio filosófico de la
Vida y la serena afirmación de que el ser humano posee unas profundas y
desconocidas interioridades, enraizadas en suelos de inmortalidad, que exigen
ser descubiertas y exteriorizadas.
El problema de la
identidad humana tiene sus orígenes en lo divino y todo cuanto hace el ser
humano en cada una de las fases de su existencia, es tratar de comprender estos
profundos y desconocidos orígenes, causas supremas de su personalidad
sicológica y remotas raíces de sus vinculaciones con el Cosmos.
A este supremo
intento del hombre, de la mujer de aproximarse a las eternas Fuentes
espirituales de su divina procedencia, se le denomina técnicamente EVOLUCIÓN, y
en lo que al ser humano se refiere, la Evolución se realiza gradualmente a
través de la línea de actividad de vida y experiencias en este mundo de la
forma física, o sea, mundo objetivo pero, la causa por la que es, viene desde
lo divino: Dios. (Vicente B.A.)
A través del
tiempo, desde que comenzó nuestra existencia en este mundo físico, que no es
nuestro hogar verdadero, -es sólo el medio con el cual construimos nuestro
vehículo en el claustro materno durante nueve meses-, los acontecimientos y
experiencias vividos desde millones de años en este planeta, La Tierra, -el Ser
en quien vivimos nos movemos y tenemos la capacidad de expresarnos, de andar en
él-, nos han permitido ir desarrollando todo lo que hoy somos físicamente
mediante la síntesis de nuestras experiencias vividas.
Hoy hemos logrado el
desarrollo perfecto de nuestro cuerpo, de nuestra mente, de nuestras emociones,
de nuestra capacidad de amar, de crear, o sea todo lo que Dios grabó en
nosotros para que lo desarrolláramos y lográsemos a través de la conciencia, el
conocimiento conocerlo personalmente, no
a través de otros, ni literalmente, sino a través de nuestro corazón que es el
medio de contacto verdadero.
Pero mis
hermanos, el hombre, la mujer ha logrado parte del plan de Dios: Lo material,
lo exterior, ahí hemos llegado hasta los confines del universo nuestro… Nos
falta llegar hasta nosotros mismos, estamos muy lejos de nosotros…, fuera de
nosotros... Nos hemos alejado mucho de Dios, nuestro Padre… No hemos avanzado
casi nada en el desarrollo del alma, del espíritu que somos, aún no sabemos quienes
somos, qué somos…; no hemos entendido o comprendido lo que nos dijo Cristo:
“Mirad, el Reino de Dios está dentro de Vosotros”… Aún hoy en pleno siglo 21,
el ser humano sigue alimentando el odio, la separatividad, el hambre, la
ignorancia, etc., no hacemos nada por cumplir la máxima de Cristo: “Ama a Dios
sobre todas las cosas” y “al prójimo como a ti mismo”. Hace 2011 años, éramos (la humanidad como un
todo) casi niños sicológicamente…, pero hoy hemos avanzado mucho en el mundo
exterior, por eso Cristo amorosamente en la Cruz, muriendo, o sea, dejando el
cuerpo físico bastante destrozado por el hombre de la época, dijo muriendo:
“Perdónalos Padre, no saben lo que hacen”…
Sin embargo, como
la vida es dual, Venezuela Bolivariana representa hoy la esperanza para el
mundo con la proyección a todas partes, del amor, la fraternidad, la
solidaridad, igualdad, etc., y sobre todo, el compartir con otras naciones que
hoy estamos experimentando y disfrutando. Hay un cambio sustancial positivo en
la Humanidad como un todo, a pesar de las apariencias. Hay esperanzas de
redención para la Humanidad… REFLEXIONEMOS.
LA GRAN INVOCACIÓN: “Desde el punto de Luz en la Mente de
Dios, Que afluya luz a las mentes de la humanidad, Que la Luz descienda a la
Tierra. Desde el punto de Amor en el Corazón de Dios, Que afluya amor a los
corazones de la humanidad, Que Cristo retorne a la Tierra. Desde el Centro
donde la Voluntad de Dios es conocida, que el Propósito guíe a las pequeñas
voluntades de la humanidad, el Propósito que los Maestros conocen y sirven.
Desde el Centro que llamamos la Raza Humana, que se realice el Plan de Amor y
de Luz y selle la puerta donde se halla el mal. Que la Luz, el Amor y el Poder.
Restablezcan el Plan en la Tierra”. ¡Que así sea! y que todos cumplamos nuestra
parte!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario