Estamos entrando al amanecer de la Nueva Era de Acuario, el Aguador Celeste, el del Agua de Vida para la Humanidad tan necesitada de amor, solidaridad, fraternidad, conciencia y conocimiento. Pero nos interesa lo que nos ocurre a nosotros los venezolanos, latinoamericanos y por ende a nuestro país, porque conocemos la idiosincrasia de nuestros conciudadanos o paisanos y cada uno de nosotros es consecuencia de la síntesis de la vida que hemos tenido desde hace 18 millones de años, hasta este nuevo tiempo…
Hoy estamos cosechando el bien que en tiempos pasados hicimos a la vida, pero también hicimos mal, es inevitable, somos duales… Hoy lo podemos ver en Venezuela: mientras nuestro amado Presidente se da por entero al bienestar de la nación y nos da a los venezolanos, sus hermanos, la mayor suma de felicidad posible, porque él conoce nuestras necesidades y conoce también a nuestra Patria porque ha vivido en ella desde pequeño lo que es la pobreza, la escasez, la injusticia; conoce de cerca las debilidades humanas y también la deslealtad, la traición, también conoció y conoce el amor, la fraternidad, amistad, solidaridad, la abundancia, el poder, etc., se ha abocado a servir a Venezuela en una entrega total, olvidándose de sí mismo…, y como la vida es dual…existen las personas que anidan en su corazón la ambición, la traición, el egoísmo, la separatividad, el poder, y como es normal en este mundo, se revuelven contra nuestro Presidente, su hermano mayor y contra su madre Venezuela, envenenándola, calumniándola, fortaleciendo el mal contra ella, porque quieren todo para ellos…Estamos sembrando para un futuro inmediato, el bien y el mal, toda Venezuela tiene la responsabilidad ante Dios de redimirse… Esperemos que el bien sea superior al mal y las bendiciones de Dios que hoy tenemos en abundancia, paz, democracia socialista, igualdad, equidad, etc., no la perdamos.
Nuestro Presidente, de alguna manera, está redimiendo el mal que sus hermanos están generando contra ellos mismos y contra Venezuela como un todo. Y el amor del pueblo bendito y sabio lo está ayudando y protegiendo, y tan cierto como que DIOS ES, el, Chávez, está saliendo triunfante de este sacrificio, de esta prueba…
Bendito sea mil millones de veces nuestro Presidente Hugo Rafael Chávez Frías, Presidente de Venezuela Bolivariana y que tu inmenso amor fortalecido por el amor del Amado Cristo Jesús, trasmute en amor y conciencia patria a los Judas de Venezuela.
LA GRAN INVOCACION
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